GRAND PRIX (1966). John Frankenheimer. Drama deportivo. Jóvenes. ***. DVD.

Todo aficionado al cine y al automovilismo no debería perderse una película que, al igual que Las 24 horas de Lemans, ha sabido trasladar a la pantalla la esencia de las carreras de coches en toda su grandeza. Una película que se acerca a este deporte con admiración, respeto y espectacularidad. El tándem formado por estas dos obras refleja, apoyado en historias imaginarias,  el ambiente de la fórmula 1 y las carreras de resistencia allá por los años 60 y 70 del siglo pasado, con una fidelidad digna de agradecer. 

He tenido la oportunidad de ver en Blu-ray Grand Prix y me ha parecido impresionante. Esta edición  saca todo su jugo a una obra muy bien rodada. Su puesta en escena permite adentrarse en un mundo singular que nada tiene que ver con el ambiente enrarecido que hoy se respira en las carreras. Había rivalidad entre pilotos y fabricantes, pero no faltaba la camaradería entre los primeros, conscientes de pertenecer a una singular raza de gladiadores contemporáneos. Seres humanos en torno a un deporte exigente, con sus grandezas y sus miserias, van apareciendo a lo largo de las tres horas que dura la película. Resulta entrañable ver rostros de auténticos mitos del automovilismo (Graham Hill, Jack Brabham, Jim Clark,...) junto a estrellas de la pantalla como James Gardner, Ives Montand o Eva Marie Saint, en perfecta simbiosis. La gira se inicia en Montecarlo y culminará en Monza, con escalas en Brands Hatch o Spa, por citar sólo algunos de los emblemáticos circuitos que son tan protagonistas como los monoplazas y sus intrépidos pilotos. En medio, vértigo, riesgo, dolor, miedo, amor, traición, lealtad, fortaleza, solidaridad y amistad. Inolvidable.

Fue dirigida con solvencia y audacia por John Frankenheimer, consiguiendo tres merecidos Premios de la Academia de Hollywood -Montaje, Sonido y Efectos Sonoros-. El tema principal de su banda sonora es ya todo un clásico de la historia del cine. CineCine.