Desde sus primeros trabajos como productor y guionista en el Grupo Ganga (Desparecida, UCO), Ramón Campos mostró que no buscaba ser uno más en el conjunto de productores de series de ambiente costumbrista de corte bajo que dominaban las parrillas televisivas. Esa tendencia se consolidó cuando empezó su andadura en una productora de propia creación, junto a Teresa Fernández-Valdés.
Guante blanco, Marco (ambas galardonas en los Premios Zapping) y la actual Gran Hotel –junto a unas más pretenciosas y más fallidas Hispania e Imperium- muestran la inquietud de Bambú Producciones por abrir nuevas brechas en la ficción autóctona.
La primera temporada de esta serie -ambientada como la segunda en el espectacular Palacio de la Magdalena de Santander- se convirtió en un drama de época que supo hispanizar y sacar provecho al reciente éxito de Downton Abbey en el Reino Unido. Y es que la histórica y jugosa división jerárquica entre criados y señores bajo un mismo techo ha dado títulos muy interesantes para la gran pantalla (La regla del juego, Gosford Park…) y para la pequeña (Arriba y abajo, la misma Abbey…). En Gran Hotel, a esa dinámica, se le ha añadido una gran dosis de misterio, con macguffins incluidos, e incluso gestionados por un detective, Ayala, que recuerda a algunos de los personajes de la escritora inglesa Ágatha Christie (convertida en un personaje que visitará el Hotel en esta tanda de capítulos)... Seguir leyendo.
Fuente: TacOnline
1 comentario :
Dicen que han gastado mucho dinero en su producción. Pero, quitando los amoríos, es casi una copia en muchos planos, composición, fotografía, vestuario, luz, diálogos...de Downton Abbey. A mí personalmente no me gusta esta serie.
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