11 de julio de 2011

Se reduce la inversión publicitaria en televisión

El máximo invertido por los anunciantes españoles fue de 3.500 millones de euros en 2007. Los últimos datos que se barajan, del 2009, no llegan a los 2.400 millones. Lo que viene a ser una caída próxima al 30% en estos años.

La publicidad tiene un origen privado y público. Es decir, mucha de la publicidad, que da de comer a las televisiones y a los medios de comunicación en general, la contratan las administraciones públicas.

La falta de publicidad aumenta el coste de las emisores públicas y convierte en inviables proyectos privados. Una prueba de esto fue, en diciembre de 2010, el cierre de CNN+ o el goteo de devoluciones de licencias de televisiones locales. Ciertamente, el tamaño del pastel publicitario ha disminuido. Y además, a este cuadro debemos añadir la aparición de nuevas cadenas, gracias a la TDT. Por lo que la competencia por los recursos, ahora menores, adquiere tintes dramáticos en algunos casos.

Las empresas desarrollan iniciativas diversas para sobrevivir. Así, buscan nuevos socios que se sumen a sus proyectos; como intentó Popular TV con María Visión, en el 2º trimestre del 2010; el acuerdo se rompió y actualmente esta cadena forma parte de 13 TV (donde la Conferencia Episcopal cuenta con el 51% de las acciones).

Por su parte, otras empresas privadas parecen intentar congraciarse con el poder político. Quizás sea el caso de La Sexta, si nos atenemos a las sospechas que circulan en la red y en otros foros. En una entrevista de Buenafuente a José María García, allá por el 2006, el veterano periodista sentenciaba: “La Sexta es de un personaje absolutamente siniestro que es cabeza visible que se llama Jaume Roures”. Nosotros no queremos interpretar el término siniestro como tenebroso, si no de izquierda. Sea como sea, si se confirman los cambios en el gobierno de la nación, veremos si este proyecto continúa su camino con el mismo vigor o no.

Una fórmula poco corriente en España es la empleada por Intereconomía; ésta llama a sus espectadores a colaborar económicamente. La cadena mantiene una línea editorial muy audaz para estos tiempos; se anuncia como de derechas en lo político y como la voz de muchos españoles que creen en valores tradicionales, tales como la religión cristiana, la familia, el amor a España, a la libertad (de información, de elección del tipo de enseñanza...), el respeto a la vida humana en todas sus etapas, defiende la democracia, la solidaridad...; ciertamente, el derecho a pensar diferente de la posición dominante en la opinión pública española. Con esta actitud combativa, se posicionan en el panorama mediático (televisión, prensa escrita y radio). ¿Lograrán mantenerse contra la corriente y en época de vacas flacas, sin nuevos aliados?

Veo Tv ha dejado de emitir por no conseguir contratos de publicidad que sostengan el actual proyecto. No descartan emprender otro formato. Habrá que esperar. Una última noticia para ilustrar la crisis: Prisa retrasa el pago de la paga extra de sus trabajadores.

En el sector público, se continúa con los recortes de gastos, como hace cualquier compañía. Pero el modelo se mantiene con el dinero de todos. Así, TVE sin publicidad en televisión pero con su asignación de los Presupuestos y, si Europa no lo remedia, con un canon a pagar por empresas privadas de comunicación. Y las autonómicas con sus contratos de publicidad y las subvenciones. La novedad puede estar en Castilla-La Mancha: se hace insostenible el déficit de la cadena regional, ¿habrá cierre, privatización?

Por el bien general, el de los inversores y el de los empleados espero que los proyectos audiovisuales prosperen. Hoy, hemos comentado algunos casos y muy someramente por cierto. Otro día, podemos volver sobre este tema. Pedro Seco Varón.

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