Un escritor necesitado de inspiración concierta por recomendación de un amigo suyo una entrevista en Canadá con Piscine Militor Patel, conocido abreviadamente como Pi. De origen indio, supuestamente Pi es dueño de una historia increíble sobre su propia vida, tan asombrosa que cualquiera que la escuche acaba creyendo necesariamente en Dios. Intrigado, el escritor escucha el sugestivo relato de Pi, cuya familia tenía un zoo en Pondicherry, en la India en los años 70. Su padre se ve obligado a desprenderse del negocio, y viaja con los suyos rumbo a Canadá, dispuesto a vender allí a los animales... DeCine21. (7/10)
Era cuestión de tiempo que la novela del canadiense Yann Martel llegara al cine. La obra ganadora del Booker en 2002 es una historia característica de la narrativa de escritores indios que viven o han vivido en Occidente. A Martel hay que reconocerle el mérito indudable de no haber abusado del pintoresquismo sincretista de muchos de sus colegas. Su novela, poderosa y bien escrita, entronca con una tradición literaria muy poderosa de la que Conrad es la cima, que sitúa al ser humano en un ambiente hostil y en situación de indefensión para ir en busca de su voz, de su manera de asumir la vida y la muerte. Fila Siete. (3,5/5)
Aunque Lee reduce y simplifica el rico fondo religioso y filosófico del libro, logra una película fascinante, con momentos de arrebatadora belleza... La deslumbrante y emocional puesta es escena de Ang Lee, la sensacional interpretación del joven indio Suraj Sharma, el abigarrado retrato costumbrista y espiritual inicial, el impresionante naufragio… justificarían de por sí la inclusión de “La vida de Pi” entre los grandes títulos del cine contemporáneo. Pero, además, la película, a pesar de sus discutibles limitaciones, plantea una profunda reflexión sobre Dios, la religión y la fe, con especial incidencia en la providencia divina y el sentido del sufrimiento. JJM (Cope). (8/10)
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