3 de julio de 2011

Las horas libres se llenan con la televisión

Los niños llevan dos semanas de vacaciones. Pero, muchos de los padres no las cogerán hasta Agosto. ¿Qué hacen nuestros hijos estas semanas? ¿Se han dado cuenta de que no se despegan de la televisión?

Bueno, esto es una exageración. No abusan de la tele, pero sí la ven mucho más tiempo que durante el curso escolar. El doctor Álvarez escribía -la semana pasada, en este mismo blog- un artículo con varios puntos interesantes. Nosotros nos fijaremos en una idea: si una persona abusa de algún entretenimiento o de un determinado aspecto de la vida, aunque sea tan noble como el trabajo, termina colocándose en peligro de contraer una enfermedad. 

Por ejemplo, si una persona realiza demasiado deporte, puede provocar una situación de desequilibrio para su salud o en su vida cotidiana. Pues bien, la televisión en exceso, quizás, no ayude demasiado a empezar las vacaciones. 

¿Qué alternativas podemos proponer a nuestros hijos? Si las horas no se llenan de actividades, se ocupan por cualquier espacio televisivo. Tendremos que seleccionar lo mejor de la programación. Cada familia sabrá cómo organizarse: con el repaso de las tareas del colegio, con deporte, con excursiones... que se organizan por asociaciones culturales o deportivas. 

En otras ocasiones, hemos considerado que la televisión no consiste tan solo en ver la programación de otros, sino en programar uno mismo buenas películas, documentales... mediante el DVD. Ciertamente, esto requiere invertir dinero e ir constituyendo una videoteca, de un modo parecido a cómo cada casa suele hacer su biblioteca. Sin embargo, precisamente, en las bibliotecas públicas, encontraremos unas colecciones muy completas de películas, que podemos pedir prestadas, con lo que eliminamos el costo de acceder a este cine de calidad. Esto solo nos exige la “molestia” de ir a la biblioteca. 

Sin salir de la biblioteca, también tenemos acceso a los CDs de música. Otra alternativa para completar el panorama audiovisual del verano. Y, antes de cambiar de ubicación, nos toparemos con los libros, que también son un esparcimiento que nos ayuda a formarnos. 

En definitiva, mientras que dispongamos de más tiempo para ocuparnos de los niños en Agosto, los más pequeños tendrán que llenar sus horas libres lo mejor posible. Por tanto, nos tendremos que preocupar para llenar el hueco que deja el colegio. Como padre, me deseo suerte y se la deseo a los demás padres en este cometido. ¡Qué Dios nos ayude! Pedro Seco Varón.

1 comentario :

Anónimo dijo...

la verdad es que es todo un reto: ¿qué hacer con los niños estos días? No va a ser solo ver la tele.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...